Descripción
Día a día, la repetición de técnicas agresivas (coloración, alisados, brushings…) y las condiciones climáticas externas (viento, sol…) fragilidad y dañan la fibra capilar.
El cabello está en “estado de choque”: alteradas, alas escamas se levantan dejando al descubierto el interior de la fibra. La queratina, auténtico esqueleto del cabello, queda entonces desestructurado.
Vulnerabilidad de la superficie hasta el interior del cabello.
1. Filma hidrolipídico: Escudo protector de superficie, rico en lípidos. Atacado por tratamientos químicos y mecánicos, no juega su rol de barrera frente a las agresiones y a la deshidratación.
2. Cutícula: Igual que las “tejas de un tejado”, las escama están imbricadas las unas sore las otras por el cemento intercelular. Degradado por el abuso de estas técnicas, este cemento no juega su rol de unión, Fragilizadas, las escamas se levantan exponiendo así el córtex a las agresiones.
3. Córtex: Interior del cabello constituido mayoritariamente de queratina, proteína garante de su resistencia y su elasticidad.
Dañadas por estos traumatismo, las cadenas de queratina se rompen, fragilizando el conjunto de la fibra capilar.
Desestructurado desde el interior, el cabello está extremadamente dañado y fragilidad.
Difícil de desenredar y de peinar, se vuelve seco, poroso, y frágil.
Es esencial reestructura y regenerar el cabello en estado de choque, para que recupere fuerza, resistencia y su belleza original.
Su programa de cuidados personalizados:
Repara el cabello extremadamente dañado y fragilizado.
El cabello recupera resistencia y su belleza original.
Fácil de desenredar, queda suave, flexible y brillante.
Sin sulfatos.
Sin siliconas.